En los procesos continuos se producen de manera intermitente defectos de producto, estos defectos pueden ser , un mal sellado de vacío, falta de alguna etiqueta, una incorrecta impresión de la caducidad, faltantes como de un tornillo o pieza, ausencia de algún sello o impresión, alguna etiqueta de color, alguna serigrafía, partes equivocadas o invertidas, partes mal colocadas, etc.
Es en estos casos donde se recomienda el uso de un sistema de visión adaptado al proceso buscando dar una solución a la necesidad de nuestro cliente, los sistemas pueden apoyar a reducir o erradicar los fallos.